lunes, 20 de agosto de 2012


El 79 % aguas subterráneas están mejor o igual que al final de última sequía

Madrid, 20 ago (EFEverde).- El 79 % de las masas de aguas subterráneas están en una situación mejor o igual a la existente en 2005 -último año de la grave sequía de 2003-, y el resto se sitúa en un nivel más bajo y exige, en principio, un mayor control de su aprovechamiento.
CIUDAD REAL.- El río Giguela, en Arenas de San Juan, cuyas aguas, sirven de recarga al Acuífero 23 El déficit hídrico que registra este acuifero, el gran embalse subterráneo que se extiende a lo largo de unos 5.500 kilómetros cuadrados de superficie del terreno en el Alto Guadiana, puede rondar los 2.500 hectómetros cúbicos en la actualidad. EFEverde
Así lo constata un estudio del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), divulgado hoy, que analiza la situación de los niveles del agua en los acuíferos durante el periodo comprendido entre 2005 y 2011.

En España, las aguas subterráneas suponen el 30 % del abastecimiento a la población y el 34 % del total del uso agrícola, explica el IGME, cuyo estudio emplea datos propios, del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y de algunas administraciones hidráulicas autonómicas.

El agua subterránea supone una importante fuente de recursos hídricos en gran parte del territorio nacional, tanto por la distribución espacial de los acuíferos, como por el volumen de agua que estos almacenan.

El suministro de agua potable a partir de este recurso, incluidas las industrias conectadas a la red urbana, es de unos 1.400 millones de metros cúbicos año, lo que supone el abastecimiento del 30 % de la población, mientras que en el caso de los regadíos alcanzan los 4.300 millones de metros cúbicos año (34 % del total del uso agrícola).

Las escasas lluvias que se vienen produciendo en el presente año hidrológico y su repercusión en el agua almacenada en los embalses, han puesto en alerta a los usuarios, subraya en la nota el Instituto.

Esta situación, similar a las acontecidas en anteriores periodos de sequía, dio lugar a un aprovechamiento de las aguas subterráneas por encima de su valor medio (de 5.500 a 6.000 hm3/año), lo que se tradujo en un descenso del nivel de agua en los acuíferos, que se recupera como consecuencia de la recarga procedente de las lluvias.

La principal conclusión del estudio apunta a que del total de las masas de agua subterránea en que hay información en el periodo analizado, el 79 % está en una situación mejor o similar a la existente en 2005 y, por tanto, no supone una restricción de suministro de agua para los diversos usos, siguiendo las pautas establecidas por la administración competente.

Solo un porcentaje del 21 % de las masas con información, se sitúan en un nivel de agua subterránea más bajo que al acabar la última sequía y requiere, en principio, un mayor control de su aprovechamiento".

España se divide en 25 demarcaciones hidrográficas, nueve gestionadas por la Administración Central y el resto por las comunidades autónomas.

Las cuencas hidrográficas a su vez se subdividen en masas de agua subterránea, que tienen como propósito verificar el cumplimiento de los objetivos medioambientales de la Directiva Marco del Agua. EFE

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