lunes, 8 de octubre de 2012


El caracol manzana penetra en el margen derecho del Ebro por un sabotaje

La Generalitat denuncia la introducción premeditada del molusco en ocho puntos diferentes


Ejemplar de caracol manzana en el río Ebro. / JOSEP LLUÍS SELLART


Las peores pesadillas para los agricultores del Delta del Ebro se han hecho realidad: El caracol manzana, que desde hace 3 años pone en jaque las cosechas de arroz, ha sido localizado durante esta campaña del cereal en el margen derecho del Ebro. Hasta ahora, los técnicos de la Generalitat habían conseguido contenerlo en el margen izquierdo del humedal, donde ya coloniza 1.000 hectáreas. Sin embargo, en las últimas semanas el Departamento de Agricultura ha interceptado ejemplares del molusco invasor en ocho puntos diferentes del margen derecho del humedal “sin conexión entre sí”. Por eso, desde el ejecutivo catalán creen que se trata de un sabotaje, es decir, que alguien en un acto “premeditado y voluntario” habría intentado expansionar la plaga en esa zona.

Según sostiene el departamento de Agricultura, las plagas como la del caracol manzana tienden a expandirse de manera natural. Así, durante esta campaña del arroz el caracol habría intentado traspasar al margen derecho del humedal partiendo desde el río, en tres lugares diferentes. La Comunidad de Regantes de la Derecha del Ebro y los propios agricultores, unido a los trabajos de los técnicos de la Generalitat, pudieron detectar estos intentos en un estadio inicial y tras una contundente actuación mancomunada atajaron la colonización.

Sin embargo, a la vez, en las últimas semanas también se ha producido un hecho que el departamento de Agricultura considera un “sabotaje”: De repente se ha vislumbrado la presencia del molusco invasor en ocho lugares diferentes, sin conexión entre sí ni con el río, en el margen derecho. “La única explicación es que ha sido un acto voluntario y premeditado, por eso los Agentes Rurales y los mossos d'esquadra han iniciado una investigación”, informan desde la Generalitat. Algunos de los nuevos focos se han localizado, sobre todo, a lo largo

del llamado canal marítimo de Carlos III, entre Amposta y Sant Carles de la Ràpita. Tanto el Departamento de Agricultura del ejecutivo catalán como la Comunidad de Regantes del margen derecho del Ebro han iniciado las actuaciones para luchar contra los nuevos focos detectados y también están extremando la vigilancia en toda la zona. La Generalitat ha invertido más de dos millones de euros durante los últimos dos años para detener a esta plaga.

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