Renault prepara acuerdo con LG Chem para la próxima generación de baterías

Madrid, 27 jul (EFEverde).- La automovilística francesa Renault prepara un acuerdo con la coreana LG Chem (LG Chemical) para el desarrollo y la fabricación de la próxima generación de baterías para vehículos eléctricos

Renault y LG Chem están en este momento negociando el acuerdo que hará posible la construcción de una fábrica de baterías europea dirigida por LG Chem e implantada en Francia, ha informado hoy la compañía automovilística en la presentación de resultados del primer semestre

Esta instalación producirá desde finales de 2015 la actual generación de baterías eléctricas y a principios de 2017 la nueva generación como resultado del acuerdo entre Renault, CEA (Comisión Francesa de Energías Alternativas y Energía Atómica) y LG Chem.

Con este acuerdo, Renault confirma su voluntad de estar presente en el conjunto de la cadena de valor del vehículo eléctrico, desde la arquitectura técnica hasta los motores y las baterías, y apoya la creación de una industria eléctrica francesa.

El acuerdo tripartito entre Renault, CEA y LG Chem debería firmarse en septiembre y se centrará en el desarrollo de baterías serán más eficaces en términos de duración y de carga rápida.

LG Chem proporcionará conocimientos técnicos adquiridos a lo largo de los 15 años en el campo de las baterías eléctricas, en los los que ya ha presentado más de 6.000 patentes.

En 2010, Renault y CEA iniciaron una colaboración estratégica para el desarrollo de vehículos respetuosos con el medio ambiente y la movilidad para todos, firmando varios acuerdos de investigación, incluyendo un contrato de colaboración estratégica sobre las nuevas tecnologías de baterías.

El laboratorio conjunto entre Renault y CEA sobre las "baterías avanzadas" creado bajo este acuerdo tiene como objetivo desarrollar a medio plazo nuevas tecnologías para las baterías de ion-litio con un presupuesto de alrededor de 15 millones de euros por año desde 2010.

Estas investigaciones del laboratorio, según Renault, llegan a una etapa de madurez suficiente para considerar las pruebas a escala industrial.

Las características de la planta serán de común acuerdo entre Renault y LG Chem, que deberá permitir la integración de los procesos de fabricación de electrodos y tener un potencial de expansión suficiente en términos de capacidad.

Los electrodos son un componente clave de las baterías eléctricas con una industrialización basada en las nuevas tecnologías que requieren condiciones ambientales muy estrictas (incluyendo la sensibilidad a las vibraciones) y representan casi el 50 % del coste de una batería eléctrica.

También es necesario que desde el emplazamiento de la fábrica se pueda comunicar con todos los mercados europeos reduciendo al mínimo los costes de logística. La capacidad de producción y el empleo previsto en esta fábrica deben ser revisados al alza en relación al proyecto inicialmente previsto.

La Alianza Renault-Nissan habrá invertido 4.000 millones de euros antes de 2015 en el programa eléctrico y prevé la venta de 1,5 millones de vehículos eléctricos en 2016.

Renault es actualmente el líder europeo de ventas de vehículos eléctricos y es el único constructor con una gama completa en este momento de tres vehículos eléctricos: Kangoo Z.E., Fluence Z.E. (equipados con baterías AESC de la "joint venture" entre Nissan y NEC), y Twizy (equipado con baterías de LG Chem)

En el último trimestre de este año la gama se ampliará a cuatro modelos con la incorporación del compacto Zoe, de tamaño cercano a un Clio, que equipa baterías de LG Chem.

El Zoe ya se produce en la planta francesa de Flins, mientras el de Kangoo Z.E., se produce en la instalación de Maubeuge, con los que el 80 % de los vehículos eléctricos vendidos por Renault en el mundo se fabricarán en Francia en 2015.

A esta producción se suma la de batería en la planta de Flins y la anunciada tercera generación de motores eléctricos de la marca, a partir de 2013 en la planta francesa de Cleon.

El Fluence se fabrica en Turquía y el Twizy en España, en la factoría de Valladolid. EFE