miércoles, 5 de diciembre de 2012

EXTREMADURA!


La dehesa extremeña, Red Natura 2000 en estado puro

Autor:Raúl Casado.

Madrid, 5 dic (EFEverde).- Están profundamente intervenidas ("humanizadas") por el hombre; albergan extensas siembras de trigo, de cebada o de avena; sirven de pasto para el ganado porcino, ovino, bovino y caprino; la madera de sus árboles, sobre todo la de las encinas, se utiliza para leña; y del corcho de sus alcornocales salen casi todos los tapones. Son las dehesas extremeñas, Red Natura 2000 en estado puro, porque además de esa productividad y rentabilidad económica, son el hábitat preferido de muchas especies de flora y de fauna.

Muchos territorios han sido profundamente intervenidos por el hombre hasta provocar el nacimiento de un nuevo ecosistema, las dehesas, un hábitat ahora imprescindible para muchas especies y uno de los mejores ejemplos de lo que significa la Red Natura 2000. FOTO: Raúl Casado


El Parque Nacional de Monfragüe, en Cáceres, está rodeado de miles de hectáreas de dehesas en las que muchas de las aves rapaces y carroñeras encuentran su sustento, pero en las que una gestión sostenible, como la que por ejemplo está haciendo la Fundación Global Nature, está permitiendo además la recuperación y el mantenimiento de razas autóctonas como la vaca blanca cacereña o la oveja merina negra.

El "adehesamiento" de una gran parte del territorio extremeño comenzó, como en otros lugares de España, en el siglo XVIII, con el objetivo de conseguir una rentabilidad económica superior a la que lograban en aquellos espesos bosques, y para ello se despejó el terreno eliminando la mayor parte de los árboles, arbustos y matorrales para favorecer la agricultura y el crecimiento de alimentos que sirvieran de pasto para el ganado.

Esa transformación del terreno ha propiciado el nacimiento de un nuevo ecosistema y de un nuevo paisaje, y esas dehesas ocupan por ejemplo en la actualidad la mayor parte de la Reserva de la Biosfera de Monfragüe, un "título" del que goza desde el año 2003. Y de las más de 100.000 hectáreas que están incluidas en esa reserva -entre las que encuentra la totalidad del Parque Nacional de Monfragüe- el 60 por ciento son dehesas.

Pero además de esas credenciales (Parque Nacional o Reserva de la Biosfera), este entorno cuenta con prácticamente todas las figuras de protección que existen; está incluido en la Red Extremeña de Espacios Naturales Protegidos, es Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) y Lugar de Interés Comunitario (LIC). Es por lo tanto uno de los ejemplos más claros de que la presencia humana es necesaria, y de que el paisaje y muchas especies dependen de esa presencia: Red Natura 2000 en estado puro.

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