Aranjuez tala 80 tilos históricos por el “cambio climático”

El Ayuntamiento defiende que las especies no autóctonas deberán ser sustituidas por otras que exijan menos recursos

TONO CALLEJA Madrid 23 FEB 2012 - 08:27 CET

“Hemos tenido unos años más secos y calurosos, por lo que los árboles, que ya se encontraban en su límite estacional, se ven abocados a una lenta agonía que siempre acaba con la muerte de los ejemplares. Esto se ha podido ver con los magnolios del Parterre, los nogales de la calle de la Rúa, los robles del Paseo de las Aves y en los tilos del camino de La Romana”. Esta no es la explicación de un ecologista beligerante con el cambio climático sobre la tala de 80 tilos ubicados dentro de la demarcación protegida declarada Paisaje Cultural Patrimonio de la Humanidad. Es un extracto de la intervención realizada ayer, en el Pleno municipal, por del concejal de Medio Ambiente, Parques y Jardines y Agricultura de Aranjuez, José González Granados.

El edil inició su intervención en el Pleno asegurando que esas conclusiones procedían de los informes realizados por el Instituto Madrileño de Desarrollo Rural y Agrario (Imidra). En declaraciones a este periódico, González Granados fue más allá y aseguró: “Con el cambio climático, todas las especies que no sean autóctonas, como por ejemplo los tilos, tendrán que ser sustituidas por otras que exijan menos recursos, procedentes del Norte de África”. En este caso, la Comunidad procederá a la rehabilitación de las acequias, para posteriormente plantar 288 álamos blancos, una especie habitual en las riberas del Tajo.

González Granados, autor de 13 libros e innumerables artículos sobre el tema en su calidad de ingeniero forestal, explicó que el Imidra optó por talar los 80 árboles por su pésimo estado, provocado, entre otras cosas, por la bajada del nivel de las aguas subterráneas: “Ese paseo no disfruta del riego tradicional de las caceras o acequias, por lo que dependían de la capa freática y del sobrante de una parcela de regadío de alfalfa colindante que ha estado en secano durante los últimos años”. El resultado: “De los 80 árboles, 50 estaban muertos o moribundos. Los restantes han sido trasplantados”.

Pero el edil de Medio Ambiente no defendió en todo momento la actuación de la Comunidad de Madrid, lamentando que no se hubiera comunicado la tala al Ayuntamiento, “algo que hubiera evitado la alarma social. Si se le puede achacar algo es que no comunicara con la suficientes antelación la intervención. Pero lo hemos solucionado, creando una comisión que se reunirá antes de que se produzcan este tipo de actuaciones”, dijo el concejal.

Al ser preguntado acerca de si el trasvase al Levante español habría provocado esta bajada del nivel freático contestó: “Ese es otro tema. Pero lo que está claro es que si el río lleva menos agua el nivel freático baja”.

Estas explicaciones no convencen a Ecologistas en Acción, que rechazan las talas de árboles como mecanismo de restauración de la zona, que es patrimonio de la humanidad: “Justificar con el cambio climático la tala de estos árboles es una excusa y no tiene ningún sentido. Y ni mucho menos los árboles están en peligro por la falta de agua. Lo que tienen que hacer es restaurar las acequias, que al final son las que permiten el riego”, explica Miguel Galarza, que denuncia otras intervenciones en contra del medio ambiente: “Junto a la Puerta de Legamarejo [muy cerca del camino de La Romana] han sido calcinados y talados múltiples árboles de diferente porte, edad y variada especie. De hecho solo continúa en pie un fresno”.

Al igual que los ecologistas, los partidos de la oposición plantearon ayer en el Pleno municipal sus dudas respecto a la tala de los árboles, y sobre todo la falta de información. “Nosotros nos enteramos de que estaban cortando los árboles y lo comunicamos a la Policía Local, a la Guardia Civil y a la Policía Nacional”, explicó el edil socialista Óscar Blanco.

Tanto la concejal de IU, Eva Abril, como el independiente Alejandro San Marcos rechazaron la “falta de información” por parte del Ayuntamiento. “No estamos en contra de la tala, sino de que no se haya explicado nada”, dijo San Marcos.