Crecer en un planeta limitado
Tiene razón José María Ridao en su artículo La socialdemocracia en su laberinto (EL PAÍS, 24 de abril), cuando afirma que no solo es la socialdemocracia la que está en crisis sino el propio sistema neoliberal con su sector financiero desregulado campando a sus anchas y poniendo en jaque a las democracias europeas.
Muchos pensamos —aunque una parte todavía exigua entre los miles de millones de personas en edad de votar— que esta crítica se queda corta si queremos presenciar el panorama del futuro que se nos abre ante nuestros ojos. No solo estamos padeciendo una crisis económica profunda e incubando una crisis democrática, sino que las décimas de fiebre del enfermo se pueden traducir en un aumento de varios grados por las crisis energética y ecológica. Y esto ya no pone en cuestión al sistema neoliberal sino al propio sistema económico capitalista que nos ha metido en vena la necesidad de un crecimiento continuo. Ahora que está de actualidad la pregunta ¿Es tan difícil entender que no hay dinero?, podemos recordar esta otra pregunta recurrente ¿Es tan difícil comprender que no se puede crecer indefinidamente en un planeta limitado? Supongo que algunos de los políticos que acceden al poder son conocedores de la situación, pero que no elevan esta cuestión decisiva hasta las altas instancias mundiales porque pensarán que “no toca”. Y, entonces, ¿cuándo toca? Según datos de fuentes fiables queda un periodo de 25 años o menos para reaccionar, para de manera concertada, pautada y controlada encarar un periodo de decrecimiento que nos encarrile hacia la sostenibilidad con el Planeta.— Máximo Luffiego Garcia y Julio Soto López.
No hay comentarios:
Publicar un comentario